Una ráfaga de viento al levantar polvo pudiera transportar partículas que, si no tuviéramos cuidado, pudieran caer a nuestros ojos. Sin embargo, no solo puede ser efecto del medioambiente, también pudiera ser una pestaña, o algún cuerpo extraño que llegara a introducirse en nuestros ojos y causar molestia, dolor o incomodidad, a lo que llamamos coloquialmente: ¡me entró una basurita en el ojo!
Una basurita ocular es aquel cuerpo extraño ajeno a las estructuras de la superficie del ojo, por ejemplo, partículas del medio ambiente, dentro de las más comunes nos encontramos las de polvo, algodón (que se usa para desmaquillarse), pelusas de la ropa o del cubrebocas, pestañas o pelo de las mascotas. Si no somos cuidadosos con el manejo del cuerpo extraño podríamos ocasionarnos lesiones superficiales en córnea o conjuntiva, inflamación e infecciones, y en casos extremos al tratarse de un objeto punzocortante, un traumatismo que provoque que la partícula penetre al interior del ojo, y que, de no atenderse a tiempo pudiera tener consecuencias graves,
Sabiendo que no debemos tomarlo a la ligera, lee los siguientes consejos que Manzanilla Sophia expertos en el descanso y cuidado de los ojos nos brindan para solucionarlo de la mejor manera:
1. Parpadea hasta lagrimear. Cuando nuestro ojo siente alguna incomodidad y sensación de un cuerpo extraño, de manera espontánea el parpadeo suele aumentar, esto también lo podemos realizar a voluntad para generar lágrimas que nos ayuden a expulsarlo de forma natural. Es necesario acudir al oftalmólogo si persisten las molestias para descartar alguna lesión en la superficie ocular.
2. Protección extra. Si sabes que estarás a la intemperie, que donde te encontrarás habrá polvo, tierra o mucho viento, utiliza lentes de protección que cubran tus ojos. Estos están diseñados para funcionar como escudos que evitarán que penetren partículas y así puedas ver sin inconvenientes.
3. Lubrica. Si tus ojos no producen suficientes lágrimas para ayudar a expulsar la basurita, no dudes en usar soluciones oftálmicas como lubricante o producto de limpieza ocular para hidratar la superficie y que sea más fácil de “barrer” con el parpadeo. Una gran opción es utilizar las gotas oftálmicas Manzanilla Sophia hechas a base de manzanilla natural, ideales para ayudar a los ojos a tener un óptimo descanso, limpiarlos de impurezas y refrescarlos.
“Manzanilla Sophia es un producto oftalmológicamente probado, con el PH, esterilidad y concentración segura para nuestra superficie ocular, por lo que no debe faltar en nuestro botiquín. Se recomienda aplicar una o dos gotas en el(los) ojo(s) afectado(s) y parpadear para barrer la partícula con los párpados. Sentirás en automático la sensación de frescura que brindan las gotas, con lo que ayudará a aliviar la molestia experimentada. Si se requiere, puedes aplicar una gota extra”, sugiere Alejandra Ochoa, gerente regional de mercadotecnia ojo rojo de Laboratorios Sophia.
4. Consulta al oftalmólogo. En caso de que no puedas retirar la basurita mediante el parpadeo o con soluciones oftálmicas, no intentes por ningún motivo sacarla con los dedos, pinza o algún otro objeto, pues pudieras empeorar la situación. Acude con un especialista que te ayudará a extraer el cuerpo extraño e indicará los cuidados correctos después de la visita.
Con estos básicos consejos, nos queda claro que no dudarás de guardar en tu botiquín un frasco de gotas Manzanilla Sophia. Su uso es recomendado para toda la familia y pueden ser aplicadas las veces que sean necesarias durante el día. Se pueden usar también cuando se presente irritación ocular menor. Recuerda siempre que, si persisten las molestias, lo mejor es acudir con un especialista.
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