La toxina botulínica para las migrañas

La toxina botulínica, se utiliza de muy manera similar  como en medicina estética, en el tratamiento contra la migraña crónica. 

La Dra Karen Carrillo inyecta la toxina botulínica de modo subcutáneo con una pequeña aguja, en músculos específicos como son alrededor de la cabeza, frente, las sienes y el músculo que va del cuello al hombro (trapecio). La intención es relajar estos músculos tensos que generan la migraña. 

No existe un límite del número de infiltraciones que se puedan hacer, para esto se tendrá que hacer una previa valoración para hacerlo de manera personalizada.

Desde hace años, este tratamiento está aprobado, y las infiltraciones se hacen generalmente cada 3 a 6 meses. A partir de la primera semana se pueden notar los resultados, no afecta movilidad alguna ni congela ningún músculo por lo que el paciente puede estar tranquilo. 

Hay gente que desde muy temprana edad tiene migraña crónica, por lo que se recomienda pasando la pubertad probar la aplicación, para obtener mejores resultados.

Es importante mencionar que esto no significa que se vayan a ir por completo las migrañas, sin embargo está comprobado que si se reducen de manera considerable y quien lo prueba no deja de utilizarlo. 

Recordemos que es un tratamiento de apoyo que dura de 4 a 6 meses y dependiendo del paciente se puede utilizar toxina botulínica como único tratamiento y en otros es necesario seguir con el apoyo de sus medicamentos, depende del nivel de migraña. 

Personas que son aptas para este tratamiento:

  • Sufren de migraña más de 15 días al mes
  • Más del 50% de los días son crisis migrañosas
  • Llevar mínimo 3 meses padeciendo este cuadro. 

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